Mostrando entradas con la etiqueta Biografia de Jorge Enrique Adoum. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Biografia de Jorge Enrique Adoum. Mostrar todas las entradas

12 de octubre de 2019

HISTORIA DE LA CANCIÓN VASIJA DE BARRO


(tomado  del muro de Victor Manuel Murriagui Borja)

Parte I

Vasija de Barro es uno de los himnos de este país y por ende un símbolo nacional. Esta es su historia y la canción original: texto extraído del libro "Gonzalo Benítez: tras una cortina de años."

Me encontré en la calle Guayaquil con el Oswaldo Guayasamín y nos invitó, pues, a una reunión en su casa para el viernes 7 de noviembre de 1950 a las 7 de la noche; pero recién podíamos ir después de la Radio a las nueve y media. “A la hora que quieras”, me dice, “y por favor invítale al Valencia”.

Así que fuimos a donde el Oswaldo, pero no tenía la casa de ahora sino que vivía donde el papá, al frente de la Basílica. Llegamos como a las diez y media y les encontramos ya medios avanzados. Fuimos con una guitarrita mía que después rompió el Valencia en una reyerta. No ve que le prestaba mi guitarra para sus serenatas; así, que él se había defendido con la guitarra y me entregó el mango no más...

En la fiesta había unos 80 invitados entre poetas, pintores y alumnos de la Escuela de Bellas Artes de La Alameda. Ahí nos pidieron que cantemos y después del canto ya se hicieron grupos, así es que me fui a donde tomaban menos y el Valencia se fue a donde estaban dándole duro.

Ahí le veo al Jorge Carrera Andrade que estaba ilusionado con un cuadro del Oswaldo llamado El Origen. El cuadro estaba todavía fresco y hasta me manché los dedos. En la pintura había una vasija de barro y, dentro de esta, unos esqueletos pequeños, de niños. El Oswaldo explicó que los Incas enterraban a sus familiares dentro de la vasija junto con alimentos. Se impresiona el Jorge Carrera y le vemos que se va a la biblioteca, coge un libro y en la contratapa escribe una estrofa:

Yo quiero que a mí me entierren
como a mis antepasados
en el vientre oscuro y fresco
de una vasija de barro.

Nos impresionó a nosotros también... Cuando en eso coge el libro el poeta Hugo Alemán y debajo escribe otra estrofa:

Cuando la vida se pierda
tras una cortina de años
vivirán a flor de tiempo
amores y desengaños.

Y para susto de todos coge el libro el pintor Jaime Valencia que escribe un cuarteto muy lindo:

Arcilla cocida y dura
alma de verdes collados
barro y sangre de mis hombres
Sol de mis antepasados.

Entonces cogí el libro porque dije a mí me toca poner alguna cosita, cuando en eso me arrancha el Jorge Enrique Adoum y me dice: “Ve vos después cantarás”. Cogió el libro, corrigió cosas y puso la cuarta estrofa:

De ti nací y a ti vuelvo
arcilla, vaso de barro
con mi muerte yazgo en ti
de tu polvo apasionado.

Terminado eso, se dieron las vueltas, nadie sabía quién iba a poner música, qué se iba a hacer con la letra. Serían las doce y media. Cuando le veo al Jorge Carrera Andrade que se acerca donde mí con el libro. Entonces me dice: “Vea Gonzalo, esto con música tiene que ser una belleza”. Pensé y le dije: “Bueno”, así es que cogí la guitarra.

¿Y ahora qué hacía? El Potolo estaba dándole al chupe y era muy difícil concentrarse con la bulla de la gente, pero como ya le acepté, bajé unas gradas con luz que había al fondo, agarrado la guitarra y el libro. Me demoré cerca de una hora y, cuando ya estuvo, regresé y encontré a mi compañero Valencia medio dormido en un sillón.
Total que le levanto y le digo: “Primero oíme cantar”. No le gustó y me dice: “Pero vos le has puesto un ritmo cadencioso“. Le digo: “No, porque la música tiene que estar de acuerdo al sentido de la letra”. “No, me dice, ponéle ritmo de albazo”. Le dije que no, porque el ritmo de danzante es telúrico. No acepto que le cambies.

Y como él siempre decía que es hincha del Aucas y que nunca pierden, cuando mucho empatan, le dije que yo era de la Liga y que ahora sí él iba a perder, ni siquiera a empatar. Así que le fui obligando y, como tenía buen oído, aprendió rápido.

Ensayamos para hacer el dúo y cuando cantamos la gente se emocionó tanto que se han pasado cantando hasta las seis de la mañana. Yo me salí como a las dos, porque como no chupaba... Ahí nació la Vasija de barro, que ahora es cantada en todo el mundo. Yo mismo no creía.



Parte II

Para que quede como documento, les pedí a los que escribieron que firmen y yo también dibujé un pentagrama y escribí los primeros compases. Entonces le dije a Valencia que firme también, como él estaba cantando...Y así quedó.
Incorporamos la canción al repertorio de las audiciones y seis años después, todavía nadie quería grabar esa pieza, ¿qué tal?

Así que fui donde Gustavo Müller de Discos Nacional a decirle: “Tengo una canción muy bonita”, y le canté la Vasija de barro. No me dio ni la hora. No llegué ni a la segunda parte porque me dio coraje. “No, no”, me dice, “eso no es comercial, eso no se va a vender”. ¡Qué cosa más equivocada en que estaba! Hasta que ya no le quise ni oír y me salí. Pero me dije: “A este tengo que ganarle”.

Incluso el Potolo se resistía a cantar y me decía: “Más bien cantemos estotra canción porque esa ya está en desuso”. Ahí me daba iras. Me fui a mi casa -en la calle Imbabura, más arriba de la 24 de Mayo-, recorté un cartoncito y me puse a pintar una vasija de barro, le puse los pedacitos de hueso y le hice una portada de disco poniéndole Vasija de barro en letras grandes, porque hasta ese momento no tenía título la canción.
Volví para convencerle a Gustavo Müller. Fui con mi dibujito y cuando me recibe le digo: “Verá, le he traído este dibujo”, y me dice: “Bonito está. A ver, ¿cómo es la canción? Cántele porque no le oí bien”.

Le canté otra vez y pregunta: “¿Con qué instrumentos podemos grabar esto?". Le digo: “Con los mismos que tenemos”. “Entonces cite a ensayo a los músicos”. Así que reuní una orquesta de diez músicos. Al piano estaba Lucila Molestina de Pólit; en la flauta, Eduardo Di Donato; y dirigió la orquesta Manuel Espín (padre de Enrique Espín Yépez) y él mismo hizo los arreglos. Entonces hizo la grabación Gustavo Müller que sabía grabar muy bien y era profesor de sonido. Salió un disco con ocho temas y luego en un “estandar play”. Esto sucedió en 1956.

Cuando salió a la venta el disco, fui al almacén y oigo una bulla grande y cuando pregunto, me dicen que abrieron a las ocho de la mañana y a las once ya no había ni un disco. Se agotó el tiraje y estaban apuraditos en hacer una edición mayor. Así fue.

4 de agosto de 2015

Historia de la Vasija de Barro



VASIJA DE BARRO
Danzante
Letra: JORGE CARRERA ANDRADE, HUGO ALEMAN,
JAIME VALENCIA, JORGE ENRIQUE ADOUM
Promotor: OSWALDO GUYASAMIN.

Lcdo. JORGE ENRIQUE CARRERA ANDRADE VACA

Nació en Quito el 17 de septiembre de 1902 y murió en Quito el 7 de noviembre de 1987. Poeta, escritor; estudió derecho en la Universidad Central del Ecuador donde también sobresalió como líder estudiantil, es uno de los fundadores del “Partido Socialista Ecuatoriano”.
Viajó a Europa, donde estudió diplomacia en España, en el viejo continente se nutre de su cultura trabajando amistad, con escritores y poetas de renombre; conoce a Gabriela Mistral de la cual fue su secretario. Después – ya en nuestro país – fue Ministro de Relaciones Exteriores e ingresó al servicio diplomático.
Son sus obras: El estanque inefable ( 1992). La guirnalda del silencio (1926), Rol de la manzana (1928) y sus libros: Hombre Planetario (1959). Poesía francesa contemporánea (1961), entre otros.
Información proporcionada por su hijo Juan Carrera Colín.

HUGO NICOLAS ALEMAN FIERRO

Nace en Quito el 10 de Junio de 1898  y muere en Quito el 4 de diciembre de 1984. Poeta, funcionario publico, escritor; desempeño un gran papel como Presidente de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, fue también director de las bibliotecas de la universidad Central, entre otros cargos. Junto con Augusto Arias y Ricardo Álvarez integro el grupo literario “La Ronda”. Tiene obras como: Del Ayer 1947 Transito de generaciones, Presencia del pasado 1953, Distancias 1950.

JAIME ALONSO VALENCIA GÁLVEZ

Nació en Quito el 12 de mayo de 1915. Pintor de gran calidad que ha expuesto especialmente en Europa; fue Director de la Escuela de Bellas Artes y promotor de la creación del Colegio de Artes. Ha sido director artístico y técnico de las Ferias Nacionales promovidas por la Unión Nacional de Periodistas.
Publicó dos libros: Estética del arte pre-colombino y Dos etapas estelares del arte ecuatoriano.
 
Dr. JORGE ENRIQUE ADOUM AUAD

Nació en Ambato el 29 de junio de 1923 y fallece en Quito el 3 de julio del 2009, se inicia en la revista OASIS; excelente poeta, novelista ensayista y critico literario. Fue secretario del poeta Pablo Neruda.
Sus principales obras son: Los cuadernos de la tierra, Dios trajo la sombra; con los que gana el  “Premio Nacional de Poesía”  en 1952 y el primer “Premio Continental de Poesía” Casa de las Américas en 1961, respectivamente.
Su libro Poesía del Siglo XX contiene notables criticas a las obras de  García Lorca, de Pablo Neruda, entre otros escritores; también Ecuador amargo sintetiza la visión poética de Adoum y finalmente, en el 2001, publicó Cronología del siglo XX, con datos de cultura y política del Ecuador y del mundo. También son suyas: El Danzante de la ausencia, Danzante del destino, Yaraví del desterrado.

CARLOS GONZALO BENÍTEZ GÓMEZ

Nacido en Otavalo, provincia de Imbabura el 14 de enero de 1915 y fallecido en Quito el 5 de septiembre del 2005. Cantante, compositor y dibujante; su padre Ulpiano Benítez quien fue músico y compositor le inculcó el amor a la música. Estudió en el Normal Juan Montalvo donde se recibió de maestro; tocaba varios instrumentos entre ellos la flauta y la guitarra. Inicialmente formó un dueto con Bolívar “El Pollo Ortiz” con quien grabo 40 canciones para la RCA Víctor y luego hacen el famoso dúo con Luis Alberto Valencia. Tiene un doctorado “Honoris Causa” por la universidad Andina “Simón Bolívar” de Quito.
Sus composiciones son alrededor de 40 canciones en letra y música entre las que se destacan: el pasillo Soledad  el aire típico La vuelta del Chagra, La rueda de la fortuna, Ensueño, Agonía, Blancas palomas, Forasterito, Mi linda negrita, etc.
Ha recibido varios homenajes y “reconocimientos”, (que era lo que el valoraba) tanto en Otavalo como en el país. Gonzalo Aguinaga Zumarraga escribió en 1971. Los nuestros donde hay homenajes a Gonzalo Benítez, Luis Alberto Valencia, Carlota Jaramillo, entre otros.
 
LUIS ALBERTO VALENCIA CÓRDOBA

Nace en el  barrio  “La tola” en Quito, el 23 de abril de 1918 y muere en Quito el 25 de octubre de 1970. Compositor, músico y cantante, aprendió la música con su padre; fue solista y firmó también destacados duetos con  Esperanza Rivadeneira, con su hermana Olga Beatriz, Rigoberto Mena, Nelson Chávez, Carlota Jaramillo y por ultimo con Gonzalo Benítez.
Ha recibido importantes condecoraciones: Caballero de Honor de la Republica 1962, Condecoración al merito, por el Ministerio de Educación 1965, Nombramiento de Buen Ecuatoriano, otorgado por el Municipio de Quito, Condecoración al Merito por las Ilustres Municipalidades de Cuenca, Loja, Riobamba, entre otras.
En Riobamba el 21 de octubre de 1970, mientras cantaba el yaraví Desesperación de Francisco Villacrés Falconí, le sobreviene una embolia, se le traslada a Quito y muere a los 4 días; su entierro constituyo la demostración del cariño del pueblo al que tanto amó, de todos los rincones del país se dieron cita para llevarle a su ultima morada. El comediante Ernesto Alban al despedirle dijo: “…a pesar de que físicamente esta muerto para el futuro vivirá más, pues el Dios del mundo que es el pueblo lo tendrá permanentemente en su memoria…”. En su honor el Municipio de Quito rige un monumento y pone su nombre a uno de los parques céntricos de la ciudad.
Sus Obras son: Tu partida, Aquellos ojos, Te fuiste, Acuérdate de mí; la tonada Leña Verde, los albazos, Amor Imposible, la letra de El toro barroso, etc.
Para muchos ecuatorianos, Luis Alberto Valencia es el mejor cantante popular, en la historia musical de nuestro país.


  OSWALDO APARICIO  GUAYASAMIN CALERO

Nació en Quito el 6 de julio de 1919 y murió en Baltimore, USA el 10 de marzo de 1999; es hijo de Don José Miguel Guayasamín y de Doña Dolores Calero. Estudió en la Escuela de Bellas Artes de Quito donde se graduó en 1941; dos años después gana su primer premio en el Mariano Aguilera; en 1955 gana un premio en la III bienal en Barcelona, España; luego el primer premio de la bienal en Sao Paulo en 1957. En 1942 es invitado por el Departamento de Estados de USA a visitar la mayor parte de museos de dicho país. En 1944 viaja por Sudamérica y hace apuntes y dibujos para su primera seria de 103 oleos llamada Huacayñán (Fazaynán) que significa “Camino de llanto”.
En 1977 con sus hijos crea la Fundación Guayasamín y organiza tres museos: el precolombino-arqueológico con más de 3000 piezas; el colonial con mas de 800 piezas y el contemporáneo con más de 250 obras, donde hay cuadros pintados de 1964 a 1984, que corresponden a La edad de la ira; en los que se refleja la crueldad de la guerra e invasiones. Ha expuesto en los museos mas importantes del mundo y ha retratado a grandes personajes: Fidel Castro, Neruda, Rulfo, Gabriela Mistral, etc.
En 1966 empieza en Quito su obra mas importante “La capilla del hombre doliente”, con murales de mas de 2000 metros cuadrados, que es la memoria sobre América; proyecto declarado por la UNESCO “prioritario para la cultura”, al que todos tenemos que apoyar. Como dato adicional diremos que Guayasamín fue el organizador de la I Bienal de la Música Ecuatoriana.
A su muerte, el pintor – como el lo anhelaba – fue enterrado en una vasija de Barro en “La capilla del hombre“.

HISTORIA DE LA CANCION

Canción Símbolo de la Cultura Mestiza del Ecuador. Su promotor el pintor del Siglo: Oswaldo Guayasamín, quien reúne en su casa ubicada en las calles Galápagos y Venezuela en Quito, a varios intelectuales y les muestra el reciente cuadro llamado Origen, que es una mujer con un niño en su vientre en forma de vasija de barro; el niño es un manojo de huesos y a la vez una flor. (Portada del CD “Lo mejor del siglo XX” de SOC music). Reunidos Jorge Carrera Andrade, Augusto Sacoto, Hugo Alemán, Jaime Valencia, Alejandro Carrión, Jorge Enrique Adoum, Lilian Robinson, y el periodista y fotógrafo sueco Rolf Blomberg, el 7 de noviembre de 1950, a las 19h00.
Se propusieron escribir: el poeta Jorge Carrera Andrade que había llegado de Europa por esos días, fue a la biblioteca y agarro un libro al azar Tiempo Perdido (Por el camino de Swann) del francés Marcel Proust y escribió la primera estrofa; pasó el libro para que escribiera Lilian Robinson, pero ella le traslado al poeta Hugo Alemán que por entonces era Presidente de la Casa de la Cultura; la tercera estrofa la crea el pintor Jaime Valencia (quien nos da la información) y de acuerdo al orden le tocaba a Alejandro Carrión, que sintiéndose indispuesto pasa el libro a Jorge Enrique Adoum que hace la cuarta estrofa. Al leerla saborearon la belleza de su creación.
Musicalizarla, para esto alguien se acuerda que Gonzalo Benítez y Luis Alberto Valencia frecuentan por el barrio de San Juan un lugar bohemio, van en su búsqueda y esa misma noche se musicaliza, después de por supuesto analizar varios ritmos: pasacalle, pasodoble, etc., Augusto Sacoto opina que debe ser algo mas tonal con la letra y fue “danzante”.
Se graba años después con el Dúo Benítez y Valencia, y el acompañamiento del “Pollito” Ortiz, en la casa de Don Gustavo Müller.

/Yo quiero que a mi me entierren
como a mis antepasados/
/en el vientre oscuro y fresco
de una vasija de barro./

/Cuando la vida se pierda
tras una cortina de años/
/vivirán a flor de tiempo
amores y desengaños./

/Arcilla cocida y dura
alma de verdes collados/
/barro y sangre de mis hombres
sol de mis antepasados/.

/De ti nací y a ti vuelvo
arcilla vaso de barro/
 /con mi muerte vuelvo a ti
a tu polvo, enamorado./

Descripción: https://1.bp.blogspot.com/-1mpsA9Xl60I/UJkiRrKjjZI/AAAAAAAAELQ/03r-3gORNyo/s400/VASIJA+DE+BARRO+-+PARTITURA+1.jpg

Descripción: https://3.bp.blogspot.com/-9Wyuvc8VB3I/UJkiVZ6sG9I/AAAAAAAAELY/EaRfA9g0FEU/s400/VASIJA+DE+BARRO+-+PARTITURA+2.jpg



LUCHO CHALCO

Emprendimientos de Salinas de Bolívar

A través de un proceso sostenido de trabajo se han creado microempresas que nacieron de pequeñas ideas y se convirtieron en proyectos con...